Ir al inicio - Autentia

Blog

Agile Open Camp Spain 2019 – Primera edición

Por Jesús Angulo

Hola a todos, me gustaría compartir con vosotros la experiencia que he tenido la oportunidad de vivir estos días en el AOC. El evento ha transcurrido entre los días 26 y 29 de este mes en Navaluenga, concretamente en la Vector Academy es un hotel rural muy chulo con un entorno natural fantástico.

He de decir que inicialmente no tenía intención de asistir, pero finalmente debido a la baja de otro compi he tenido la ocasión de hacerlo. Ha sido una experiencia diferente el asistir a este evento “auto organizado”, en el que empiezas a participar mucho antes de llegar allí.  Ha habido cosas que me han encantado y otras que no tanto, dejadme que os lo desarrolle un poco más.

Lo primero contaros los orígenes del AOC, que ya va por su novena edición según nos ha introducido esta mañana Thomas Wallet. La primera edición surgió de Tomás Christie, Mauro Strione y el propio Thomas, a raíz de la negativa de sus jefes en permitirles ir a un evento en Colombia equivalente a la CAS en España (entiendo que esta es la tropicalización para introducirlo a los “campers”, denominación que reciben los asistentes de esta edición, la primera del viejo continente). Su objetivo fue acercar más a Sudamérica un evento agilista al que le aplicaron una naturaleza, valores y carácter propio. 

Los tres valores, o mejor dicho conexiones principales del evento, como nos recordaba Ingrid Astrid, son:

  • la conexión con uno mismo,
  • conectar con los demás
  • y conectar con la naturaleza que rodea a estos eventos en cada una de sus ediciones.

He de decir que este último punto me resulta siempre un poco difícil, viendo la cantidad de material de papelería que usamos (post-its, hojas, paneles…), aunque tendamos a usar las herramientas virtuales en nuestro día a día que nos aportan una serie de beneficios, es cierto que esos elementos físicos son fundamentales sobre todo en las fases iniciales del trabajo en equipo y aún no hemos dado con herramientas virtuales (o mejor dicho es fácil contar con ellas) que las sustituyan con homólogas ventajas.

El previo

Desde el mismo momento de la inscripción cualquiera tiene acceso a los canales de Slack, los grupos de Telegram y Whatsapp, Meetups y los Zoom/Hangouts donde han interactuado y se han sincronizado las diferentes tribus que han dado soporte a este evento. Ha sido interesante el ver cómo nos organizábamos gente tan dispar, e incluso geográficamente dispersa (ha venido gente de Chile, Argentina, Colombia,México…) y poco a poco la cosa iba tomando forma. 

Agile Open Camp previo

La transparencia es uno de los pilares, así que cualquiera que entrase en el canal de slack aoc-finanzas-sponsors podía ver cómo iban las cuentas, patrocinio, etc.

Algunos nos hemos involucrado hacia el final y es impresionante ver el trabajo de los organizadores y los voluntarios, así que no cuesta en absoluto poner nuestro granito de arena. En un entorno donde todo el mundo tiene esta mentalidad es muy fácil trabajar.

En resumen, muy rápido, se crearon 9 tribus (cada una con un organizador), en las que nos íbamos apuntando y se hacían sesiones de sincronización de la propia tribu y entre ellas, ¿os suena parecido a algo? Sí, algo así como un Nexus auto organizado y voluntario. 

Concretamente se crearon las siguientes tribus enfocadas en la gestión pre, durante y post  evento:

      1. Cosecha y Cierre
      2. Materiales, Lugares y Orden
      3. Ritmo y Tiempo
      4. Embellecimiento y visualización
      5. Aperturas & Open Space
      6. Bienestar, Deportes y Naturaleza
      7. Artes y Diversión
      8. Conocernos y  Diversidad
      9. Cocina y Cultura regional

 

Los “campers” (denominación con la que se identifican los asistentes) nos íbamos apuntando a las diferentes tribus y en el arranque del evento acabamos de completar los grupos.

 

La llegada del jueves

Lo primero que me sorprendió el jueves al llegar fue la amabilidad de todo el mundo, especialmente de las personas que venían de fuera de España, casi parecía que ellos eran los huéspedes. Tuve la suerte de que me recibieran Ingrid y Jesús y me ayudasen con el registro. La tarjeta de identificación de cada uno nos ayudaba a indicar alergias o información relevante de una forma muy sencilla, y la asignación de habitaciones por “mano inocente” también es algo sencillo y super potente que muchas veces ni siquiera tenemos en cuenta.

Después de instalarme pude dar una vuelta por los alrededores y es un paraje fantástico para disfrutar de la naturaleza. Recomiendo totalmente hacerse una escapadita para visitar Navaluenga y la zona próxima.

Después de mi caminata, volví a entrar en el edificio y aproveché para ponerme al día de los horarios debidamente reflejados en un lugar bien visible.

Agile Open Camp Viernes

Ya con la idea de cómo discurriría el viernes, no me dió mucho tiempo a más, algo de charla con las personas que iban llegando, gente que estaba cambiando de profesión, que estaba empezando con “esto del agile”, gente más cercana al software, gente menos, gente más centrada en las personas, gente queriendo un espacio para hablar con gente como ellos…

Casi seguido a estas charlas, cena y a dormir, y sí, fuí de los que hicieron “bomba de humo” (los que desaparecen de un lugar de los primeros) porque estaba realmente agotado. 

La parrilla del viernes

Arranca puntual con la introducción de los “tres monos”, y entre Ingrid Astrid, Thomas Wallet y David Roncero nos cuentan un poco más sobre de las raíces del AOC. Fantástico para entender el porqué del formato del evento.

Agile Open Camp Promotores

A continuación y a pesar de que la mayoría estamos relacionados con las metodologías y las dinámicas de una u otra forma, se explicó de forma sencilla y rápida cuál es el formato de un Open Space, lo que ayuda a que todos los que conocen el formato recuerden y los que no lo conozcan no se sientan mal. Resumido en 5 breves líneas:

  1. Están las personas que tienen que estar.
  2. Sucede lo que tenga que suceder.
  3. Empieza cuando sea el momento.
  4. Acaba cuando tiene que hacerlo.
  5. Hay una “regla de los dos pies”, si en el espacio que están no ves un aporte, nada te impide cambiar a otro.

Por si alguno queréis, podéis leerlo con más detalle en la web del BAOS y aprovecho para recordaros que será el próximo 9 de noviembre.

A continuación tras una dinámica introductoria de valores, en la que aprovechamos para hacer algo de team building (aquí sí que tenían sentido estas dinámicas, y con esto tiro una piedra que comentaré en las conclusiones) se empezaron a postular diferentes propuestas.

Ya con las propuestas se confeccionó la parrilla con 6 tracks

Agile Open Camp Parrilla

Era difícil elegir (y repartirse con el resto de compis Jeselys y Anaís, que también asistieron) y al final mi selección fué:

  1. La puerta es blanca, la facilitaba Belén de Gracia, y muy orientada a la expresión y la identificación de sentimientos a través de la expresión corporal (algo que nos puede venir muy bien en ciertas situaciones). He de decir que no estaba con el ánimo necesario, ya hasta analizarla después no supe ver el potencial de esta sesión.
  2. Producto vs. proyecto. En esta había que estar, de hecho era una propuesta nuestra en la que participamos Jeselys, Anaís y yo. Fue con un público muy reducido, pero nos dió pie a charla con personas fantásticas como Marta y María, y pudimos contrastar opiniones de los cambios profundos a los que se enfrentan las organizaciones cuando empiezan a hablar de producto.
  3. Workshop de kanban, siempre me gusta ver como tratan algunos temas otras personas, y este fué un taller impecable de Rogger Bravo y Camilo (fue una gran experiencia poder compartir con ellos y con Fabo algún rato y hablar de su Chile y enterarnos de que teníamos en común el contacto con Vanesa Tejada), condensando en poco más de 45 minutos el método Kanban de una forma sencilla y potente. El último punto que incluyeron con sus correspondientes métricas me pareció muy bueno.Agile Open Camp Kanban
  4. Taller de diseño organizacional, llegué un poco tarde por que el taller se alargó un poco, pero fué una buena conversación con conocidos como Jerónimo Palacios o Israel Alcázar entre otros. Se sumaron voces como la de Pau Mugarra o Andreu, donde se instaba a “mojarse” con aspectos como “la venta de agile” o “referencias para no cagarla”, los diferentes puntos de vista y las reticencias a meterse en ciertos charcos (o no) fueron divertidas. Para mi fué un punto de inflexión, pues estaba teniendo una sensación incómoda de carga demasiado “hippie” del evento y esto fue un revulsivo. El resumen rápido (y es una realidad que vemos en grandes organizaciones), es que la configuración estructurada, o es adaptable, o como tengas una definición dura y lenta que quieras implantar, no acabas de materializarla cuando necesitas ajustarla de nuevo. Esta sin duda fué el germen de varias buenas charlas al día siguiente.
  5. Convencer para empezar por poco, esta fué mi propia propuesta, y me sorprendió por que al final fue un tema recurrente en varias sesiones. Me resultó muy curioso cómo enfrentamos el cambio dependiendo dependiendo de la finalidad de nuestro trabajo. Por ejemplo compañeros más centrados en el mundo formativo, lo ven algo más “big bang”, que todo el munda tenga el conocimiento lo antes posible, y sin embargo desde nuestra experiencia con acompañamientos, nos parece más potente poder crear un entorno controlado reducido desde el que poder crecer, vamos, divide y vencerás.

La parrilla del sábado

La noche anterior pasa factura y todo fué más “slow”. Algún problema con el agua por  que algún despistado cerró una llave de paso… y cosas que tienen que suceder en un Open Space hicieron que se demorara todo un poco, pero en cuanto cogimos ritmo fué un día fantástico.

Arrancamos de nuevo con algunos avisos generales de organización y elaboramos de nuevo la parrilla del segundo día. El germen de la sesión del día anterior de diseño organizacional se tradujo, bajo mi punto de vista, en sesiones potentes como la de “Cagaditas” de Pau, “Vender Agile de andreu” o “Diseño organizacional desde el prisma sistémico de Mónica Expositor”.

Agile Open Camp

  1. Cagaditas. Me quedo sobre todo con el formato y la facilitación de Pau. El compromiso para entrar era escribir tu propia “cagadita” (fallo o error) y estar dispuesto a hablar de él. Una vez anotado se metía en una caja y posteriormente se fueron sacando varios para hablar de cada uno. Desde un enfoque de comunicación no violenta
  2. Vender Agile. Donde fuimos más al grano sobre cómo son las aproximaciones a las necesidades de las organizaciones. Desde puntos de vista totalmente comerciales, al concepto de oleadas (que muchas veces no es posible realizar una transformación en un único movimiento, si se producen oleadas (concepto que he escuchado a Roberto Canales), en las que cada oleada posterior consigue un mayor nivel de transformación gracias a las anteriores. Me ha parecido curioso escuchar cómo algunos no participarían en oleadas que sabes que no van a acabar “bien”, el concepto de participar solo en oleadas de éxito me sacó alguna carcajada, mi postura es clara, entonces estamos para vender y no para ayudar.
  3. Dinámicas “icebreaker” con sentido. Me quedé tan enganchado de la comunicación de Rogger que no me pensé mucho asistir a esta sesión. Es cierto que no conseguí sacarle el jugo que esperaba, pero nunca está mal tener herramientas para diferentes contextos, estas especialmente para formar equipos y para romper el hielo con miembros que no se conocen.
  4. Lean Change Management. Gastón Valle nos dió una introducción rápida a este modelo que difiere del Lean más extendido. 
  5. Diseño organizacional desde el prisma sistémico. Fantástica aproximación al diseño organizacional, no solo atendiendo a las personas o a un producto, sino teniendo en cuenta aspectos más globales del todo que son los que establecen las bases de la cultura. Concretamente de los vértices del triángulo de la imagen siguiente. Agile Open Camp Organizacion

Simplemente real y duro el ser conscientes de que hay elementos que no son exclusivamente de las personas y que de alguna forma condicionan la cultura de la que tanto se habla en los procesos de cambio. Podemos ser y desarrollarnos como las personas que queramos, pero las condiciones e influencias externas están ahí para recordarnos que hay ciertos límites. Una manual de conducta, el salario, los días de vacaciones, la ropa que podemos llevar… todo ello forma parte de este todo, del sistema que tenemos que considerar para poder evaluar el espacio central que queda como “cultura”.

El último rato que quedaba lo dediqué a hacer mis tareas de facilitación gráfica que tenía pendientes, y aunque hubiese estado bien poder quedarse el domingo, era el momento de irse. Creo que la noche del sábado fue de lo más divertida por todas las fotos que han pasado en el grupo. Como le gusta decir a Roberto Canales, “hasta las 21:00 haces contactos, hasta las 23:00 haces amigos y a partir de esa hora haces mejores amigos”.

Conclusiones

Empecé con pensamientos del tipo “Esto está desconectado con la realidad”. Veía dinámicas en las que plantear su uso con algunos equipos reales, me parecía simplemente irreal. 

Alrededor no hacía nada más que escuchar: “Qué bueno, esto voy a probarlo”, mi pensamiento siempre es el mismo, por muchas dinámicas que sepamos, si no se aplican con medida y apropiadamente, sólo se van a volver en contra de nosotros mismos. 

Estoy cansado de deformación del rol del coach. Hay que poner sentido común y pensar el por qué de cada herramienta que usamos. No se puede ir con una dinámica de conocimiento a un equipo que se conoce desde hace 20 años. Y por supuesto, no podemos ir con el “happy flower” por única bandera, es cierto que tenemos que fomentar un entorno agradable, pero no podemos olvidarnos jamás que las personas necesitan tiempo para interiorizar y cambiar de estado. Tan malo es un estado negativo, como intentar que siempre sea super positivo o que todo el mundo cambie de golpe su estado anímico, hay que saber leer a las personas y que es lo que necesitan en cada momento.

Y aunque, como comentaba al principio, todo empezó “muy hippie“ para mi gusto, con mucha ambigüedad, sí que hubo una evolución en las conversaciones que permitió equilibrar mi sensación y marcharme con la sensación de que sí, que estamos trabajando muchas personas con el foco en realizar los cambios que se necesitan.

He de decir que para los que trabajamos en el mundo del software, se me quedó un poco de vacío. Pienso que una de las charlas que teníamos propuestas “3 visiones para un coach” hubiese dado mucho juego, equilibrar la visión psicológica, con la visión de producto y la técnica que son unas bases para nosotros. Entiendo que este último vértice puede pivotar dependiendo del ámbito pero para mí en el equilibrio es donde está la potencia y la virtud. Si abandonamos cualquiera de los vértices estamos fallando.

Un placer haber podido compartir estos ratos con todas las personas que estuvieron allí. Es cierto que sin un evento de este tipo, probablemente no se habrían dado los espacios y las oportunidades de que surgieran esas conversaciones.

Ya para cerrar os dejo el vídeo resumen del evento en nuestro canal de Youtube.

Conoce nuestro servicio de Acompañamiento agile

VER
Por Jesús Angulo 15 Oct 2019

¿Cómo podemos ayudarte?

HABLEMOS